No estoy de acuerdo con las recientes declaraciones del crack argentino en las que asegura que Guardiola es más importante que él para el Barça. Ningún entrenador es más importante que cualquier jugador, aunque sea Pep y menos tratándose del jugador más determinante del fútbol actual. Digo el más determinante porque no se puede hablar del mejor bajo mi punto de vista ni tampoco del mejor de todos los tiempos porque cada tiempo tuvo sus propios cracks y también tal vez habría que hacer una división de los mejores por puestos o por líneas. El mejor Ferrari fabricado no es el primero que se hizo, el último modelo de la actualidad es mejor con toda seguridad pero cuando la prestigiosa fábrica italiana comenzó su andadura construyó con toda seguridad el mejor en aquellos tiempos, por lo tanto llego a la conclusión haciendo esta simple analogía que son incomparables como lo son Messi y Maradona, Messi y Pelé o Messi y Di Stéfano.
Messi ha adquirido esa falsa humildad que demuestra su entrenador asiduamente, eso es lo peor que le ha trasmitido y probablemente lo único malo a mi entender. No comparto la soberbia que destila Ronaldo pero no puedo soportar tampoco la falsa humildad con la que Messi se expresa estas declaraciones. Cada uno tiene que asumir su rol en un equipo y sigo pensando que ningún técnico será nunca más importante que los verdaderos protagonistas del mundo del fútbol.