miércoles, 20 de junio de 2012

España - Francia: la revancha es un plato que se sirve frío.


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Mejor que venganza, prefiero hablar de revancha o desquite porque vengar es un verbo muy feo y cuando hablamos de deporte creo que la revancha o el desquite me parece legítimo e inherente al juego dentro de unas reglas propias del fútbol en este caso.
Si hacemos memoria son unas cuantas las ocasiones en las que Francia nos ha dejado fuera de competiciones oficiales mientras que nosotros sólo éramos capaces de ganarles en amistosos. Pero las cosas han cambiado mucho desde el último enfrentameinto oficial entre las dos selecciones y es ahora el momento en el que España está en plena madurez de juego y de unos éxitos que parecían que nunca iban a asociarse a nosotros. Francia se está reconstruyendo y parece que tiene mejor apariencia que en el pasado mundial en donde fue el hazmerreír de la competición y de la que quedan sólo dos jugadores, Ribéry y Lloris.
España es favorita, sin lugar a dudas y sin ninguna intención de eludir esa condición pero sabiendo que Francia se crecerá enormemente ante España y pondrá las cosas muy complicadas. Además después del fiasco del último partido ante Suecia, resulta difícil pensar que los gabachos puedan perder dos partidos consecutivos al menos haciendo casi el ridículo, tendrán ganas de desquitarse de la imagen más reciente del partido de la primera fase ante Ibra, que siempre en fútbol es la más valorada.

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